El senador provincial Sebastián Galmarini se reunió con el Foro de Seguridad de Martínez, que elabora las estadísticas sobre hechos delictivos ocurridos en la localidad y desarrolló un mapa delictual, además de participar en muchas actividades de concientización y articulación con instituciones del barrio para ayudar a revertir este problema. El tema dominante del encuentro fue, precisamente, la inseguridad creciente que se vive en San Isidro y en la Provincia de Buenos Aires.
El primer asunto que se analizó fue la implementación de la policía local y el trabajo del Comando de Prevención Comunitaria (CPC). Los vecinos expresaron sus dudas respecto a la preparación de los nuevos agentes y manifestaron: “La policía local tiene una capacitación de apenas seis meses. ¿Por qué si un policía de la bonaerense tiene dos años de preparación, meten en el Comando de Prevención Comunitaria a pibes con apenas 6 meses de formación?”.
“Scioli desestimó el debate por la policía municipal y la reemplazó por el Programa de Policía de Prevención Local, creada por decreto, cuyos recursos humanos dependen de la Policía Bonaerense, o sea que es la misma policía pero con otro nombre y menos formación y recursos. Nosotros planteamos una verdadera policía municipal, una policía de prevención, que conozca el barrio y controlada por el Intendente, que es quien conoce el territorio”, explicó el senador del Frente Renovador.
Una vecina describió una situación que vivió en una comisaría de la zona: “tuve un episodio de inseguridad y fui a la comisaría a hacer la denuncia, serían las doce de la noche. La puerta, cerrada con llave. Abren la puerta y el policía nos dice ‘¿qué voy a hacer? No tengo patrulleros, estoy solo, con los calabozos llenos, tomando denuncias ¿Si viene algún familiar de alguno de los presos y toma la comisaría?’”.
Preocupado por el aumento de los robos en San Isidro, un vecino le consultó a Galmarini qué se puede hacer desde el municipio. “El cambio sustancial en materia de prevención del delito es que el intendente diga ‘Yo me hago cargo’. El cambio de paradigma de gestión municipal pasa por ahí, que se deje la vieja idea del intendente que se ocupa del Consorcio para Alumbrar, Barrer y Limpiar, y tome las nuevas demandas como propias. Sergio Massa armó un 0-800 Droga No: cuando vez alguna situación en tu barrio, podés llamar, te atienden y mandan el patrullero municipal. Además, en Tigre las cámaras registran todas las patentes y las cruzan con las de vehículos con orden de secuestro. En un territorio cuatro veces más grande, en Tigre roban un tercio de autos menos que en San Isidro, como surge de las estadísticas de las empresas aseguradoras”, contó Galmarini. “Nosotros presentamos un proyecto en el Concejo Deliberante para implementarlo en San Isidro, pero la mayoría automática de Posse se negó a debatirlo”, agregó el legislador.
Galmarini y los vecinos coincidieron en que el problema de la inseguridad no se soluciona solamente saturando la calle de policías y patrulleros. “Hay problemas de fondo de los que hay que ocuparse: la educación, las cuestiones sociales, la droga, la justicia”, dijo una vecina. “Por eso digo que el cambio sustancial empieza por hacernos cargo”, remarcó el legislador.
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