El Senador Provincial Sebastián Galmarini recorrió las instalaciones del colegio Las Lomas Oral, una asociación civil sin fines de lucro que brinda servicios educativos a niños con pérdidas auditivas desde el momento de su nacimiento. Fue recibido por Inés Parera, Directora del colegio; Mariela Perkins, Presidenta de la Asociación Civil, y Débora Barrera, Responsable de Desarrollo Institucional, quienes le describieron el trabajo que realiza la institución.
«Trabajan hace más de 20 años enseñando a niños hipoacúsicos a escuchar, hablar y a comunicarse a través de una metodología que requiere un trabajo de enseñanza intensivo, personalizado y desde las etapas más tempranas del desarrollo. Desde Las Lomas Oral están haciendo un fuerte trabajo de articulación con hospitales y otras instituciones, para promover la detección precoz de la hipoacusia, de modo tal que las familias puedan tener la oportunidad de elegir para sus hijos el mejor tratamiento y lo antes posible», comentó Galmarini.
«Nuestro objetivo es que los niños con discapacidad auditiva puedan integrarse al colegio tradicional con la mejor preparación posible», explicó Perkins, quien además de presidir la asociación civil es madre de un joven de 17 años que es uno de los egresados del colegio.
«En la actualidad tenemos 84 alumnos, la mayoría con discapacidad auditiva severa y profunda”, contó la directora Parera. Una de sus principales preocupaciones es poder extender la jornada de su oferta educativa, para que los niños puedan ganar más horas de talleres, gimnasia, clases y tratamiento, algo fundamental para su adecuada estimulación.
Precisamente, el senador se ofreció a realizar las gestiones necesarias para que cada vez más chicos puedan acceder a esta escuela, sin que ello dependa de su capacidad económica. “El compromiso que tienen no sólo los directivos y docentes, sino también los padres de los alumnos y ex alumnos con esta comunidad educativa es sorprendente. Será un placer poder contribuir para que sus esfuerzos se sigan multiplicando”, expresó Galmarini.
Deja tu comentario