“Los partidos políticos deben oficializar sus listas de candidatos respetando para los cuerpos colegiados una equivalencia del 50% por ciento del sexo femenino y otro50%  del sexo masculino, para toda las categorías de cargos. En las listas de candidaturas políticas tiene que haber una equidad real entre hombres y mujeres”, manifestó el senador Sebastián Galmarini al presentar el proyecto en la cámara alta bonaerense.

“La lista deberá cumplir el mecanismo de alternancia y secuencialidad entre sexos por binomios (mujer-hombre u hombre-mujer)”, argumentó el legislador que impulsa la ley de paridad para incorporar la participación política equitativa entre géneros para todos los cargos representativos de la provincia.

Nuestro país fue el primero en el mundo en sancionar la ley de cuotas o cupo femenino que definió un porcentaje mínimo del 30 por ciento de representación en las listas de legisladores nacionales. “Fue un largo camino para obtener que esa representación se amplíe a todas las provincias y niveles. Sin embargo, las prácticas políticas convirtieron ese cupo en un techo máximo para las mujeres”, declaró el presidente de la comisión de Reforma Política y Reforma del Estado.

“La paridad es un paso más para alcanzar la equidad en la actividad política, no solamente para promover la participación genuina de las mujeres en el ejercicio del poder y en la toma de decisiones en un mundo que es predominantemente masculino, sino que además va a incorporar definitivamente en las agendas de gobierno materias y cuestiones que los hombres muchas veces descuidamos. Córdoba, Río Negro y Santiago del Estero ya poseen un sistema electoral paritario de esta naturaleza. Además de debatir este proyecto en nuestra provincia, también se discute en la legislatura porteña. Ambos son los distritos de caudal electoral más importante del país”, concluyó Galmarini.